Durante los últimos días Estados Unidos e Israel amenazaron con un ataque bélico a Teherán y en Tel Aviv, el presidente Shimón Pérez consideró muy probable una agresión contra reactores iraníes. El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) presentó un informe, en el que acusa de Irán de desarrollar un diseño de bomba nuclear, documento que Teherán calificó de no profesional y motivado políticamente.
El ministro de Asuntos Exteriores Alain Juppé elevó hoy el tono contra Irán al afirmar que Francia está dispuesta a ir más allá en el reforzamiento de las sanciones contra ese país por su programa nuclear.
"Francia está preparada para ir mucho más lejos en las sanciones, que deben reforzarse para que Irán ceda", dijo Juppé a Radio Francia Internacional, donde planteó también llevar el tema al Consejo de Seguridad de
Las declaraciones del ministro se producen poco después de que el Organismo Internacional de
Con esta posición, París se alinea a Washington, que ya anunció que contempla nuevas sanciones contra Irán.
"Estudiaremos imponer presiones adicionales contra el gobierno iraní si no puede responder a las dudas suscitadas en el informe", dijeron fuentes norteamericanas, mientras -según Juppé- hacen falta sanciones duras para impedir a Irán aprovisionarse de recursos.
Durante los últimos días Estados Unidos e Israel amenazaron con un ataque bélico a Teherán y en Tel Aviv, el presidente Shimón Pérez consideró muy probable una agresión contra reactores iraníes.
En respuesta, el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, aseguró que en caso de llevar a cabo sus amenazas militares, Washington y Tel Aviv tendrán una respuesta aplastante y se arrepentirán.
El presidente de Israel, Simon Peres, afirmó el pasado viernes que tanto su país como el mundo podrían iniciar pronto una acción militar contra Irán, aunque señaló que hay que diferenciar entre el discurso público y los acontecimientos en la práctica. «Podría parecer que Irán está más cerca de hacerse con armas nucleares. Los servicios de Inteligencia de todos los países saben que el tiempo se está acabando y están advirtiendo a sus líderes», subrayó.
Un alto cargo del Ejército estadounidense aseguró ese mismo día que su país está «cada vez más alerta» porque ahora «no parece una certeza» que Israel comunique a Washington un ataque a las instalaciones nucleares de Irán. De hecho, la «vigilancia» se habría incrementado los últimos días.
Ya el pasado miércoles el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, intentó lograr una mayoría dentro del Gobierno que apoyase un ataque a Irán, que también contaría con el respaldo del ministro de Defensa, Ehud Barak.
El Pentágono estaría especialmente preocupado por las consecuencias que tendría este ataque en Irak, donde aún permanece un importante contingente de tropas estadounidenses, y en otros países del golfo Pérsico.