Después de un prolongado intervalo a raíz del tiempo dedicado a los estudios, Marcelo Bellusci volvió a girar en un kartódromo. Y esta vez lo hizo en Chivilcoy, bajo un cielo agresivo sobre un suelo impecablemente presentado por la comisión organizadora.
La serie de la carrera llevada a cabo ayer, comenzaba a dar por tierra las posibilidades del ex-campeón. Un chasis nuevo con poco desarrollo, complicaron el manejo, amén de la falta de estado y por que no algunos años de más.
Pero
la experiencia, el manejo instintivo y la genética no fallan con los años.Antes de la final, su equipo de mecánicos dieron "vuelta" el chasis. Que la trocha...que la comba...que las libras de las gomas. En pocos minutos entregaron al piloto la herramienta casi perfecta para intentar podio. Bellusci, ya sin las distracciones que le entorpecían el manejo de la serie, antes de la primera curva de la etapa final está segundo, haciendo preocupar un joven, atlético y experimentadísimo Marcos Roldán, que perdió la modorra y la tranquilidad que trae desde que gana ya hace bastante tiempo.
En la mitad de la competencia, el motor del kart nº 8 de Marcelo Bellusci, da señales de temperatura con la tan temible "pegada" de pistón. A pesar de ello, mantiene el segundo puesto, y con el ritmo de Roldán, pero sin dejar posibilidad de ir a la caza del primer puesto.
Glorioso segundo puesto para el regreso del Doctor, que demuestra que a pesar del paso de algún tiempo, la escencia permanece intacta.
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