El viejo dicho dicho latino, hace referencia a que la voz del pueblo es la voz de Dios. Los demócratas somos afectos a creer en dicha frase. En la sesión última del Consejo Deliberante(fotos) y ante la asamblea de mayores contribuyentes se hizo efectivo el retiro de la ordenanza que preveía aumento de tasas municipales, según ya lo había anunciado el Intendente en conferencia de prensa el lunes por la mañana.
Terminó así el primer capítulo de una novela, cuyo trasfondo es una crisis política profunda que vive el oficialismo, y que sin embargo aún se maneja entre bambalinas.Hay que reconocer que Zacca, cuando las papas queman, termina entendiendo... así sucedió con el tema de relleno de basura que el entonces gobernador Solà pensaba traer a Achupallas, así sucedió cuando el bloque del Frente para la Victoria no le aprobó la redición de cuentas y también ahora... donde la gente mayoritariamente rechazaba este aumento... pero en este había condimentos especiales.Dichos condimentos son: la ya comentada renuncia de Sebastián Daffonchio, quien parece abandonar el barco por defender su nucleo familiar, puesto en la picota a raíz de sus excesos verbales en la radio, la cerrada oposición del concejal peronista de Mechita, la defección de algunos mayores contribuyentes impulsados por el oficialismo pero hoy distanciados y por sobre todo la coherente oposición del bloque radical, que en los días previos realizó una tarea de esclarecimiento, con datos precisos repecto al gasto municipal y al pretendido aumento.En la sesión en sí, a pesar de que era un formalimo, tanto los radicales( hablaron casi todos) y Traser, no dejaron cuestión referida al aumento de tasa sin cuestionar y hasta propusieron medidas de restricciones de gastos como para que el municipio no pierda de ninguna manera ni la posibilidad de brindar servicios ni la gobernabilidad, fantasma con el que Zacca amenazaba y en el que caían en forma ridícula las autoridades del Bloque del Frente y hasta las partidarias.