A partir del lamentable hecho que involucró a una perra galga y la gran repercusión que dicho suceso tiene por lo menos en los medios de prensa, quisiera, para profundizar el debate, sumar mis propias reflexiones, no todas coincidentes con la opinión mayoritaria.
En principio creo, que ahorcar la perra estuvo muy mal, y luego, también creo que la reacción es exagerada ( ver comentarios a la nota de
http://www.diarioelsalado.com/).
El ser humano, desde siempre, ha oscilado respecto a sus actitudes entre el Cielo y el Infierno y es capaz, sin duda, del acto más deleznable, como del más heroico. Hoy en la sociedad globalizada vemos y escuchamos a diario, sobre cientos de hechos con algún matiz entre estos extremos; por ejemplo en España, las cortes debaten en estos días, otorgarle derechos civiles a los grandes simios (ver artículo Diario El Día en
http://www.ottonello.blogspot.com/), para que Chimpancés y Gorilas sean sacados de los circos entre otras cosas, ya que se ha demostrado que poseen mucho de humanos, como por ejemplo la igualdad genética en un 99 %, la compatibilidad de sangre para transfusiones y un lenguaje mayor que el de un niño de siete años. Por otra parte, leemos frecuentemente de genocidios en algún lugar del Planeta.
En este marco, que aparezca una perra colgada, no tendría lugar destacado alguno.
¿Qué pasó en Alberti entonces?
Respecto a las respuestas, surgidas más de mis dudas, que de mis convicciones, podrían ser del tipo:
En Alberti pasan pocas cosas… y esto es noticia,
La policía actuó rápido y bien… y para algunos también es noticia,
La forma en que apareció, remite al ahorcamiento de un ser humano, y ello toca fibras sensibles de la sociedad,
El lugar donde apareció colgada es demasiado público.. y eso ofende y agrede especialmente.En fin, un sinnúmero de razones que tal vez se acerquen a la verdad… pero que al igual que los comentarios obvian lo que sería mas lógico, que es preguntarse el por que, conocer el motivo, conocer en que marco aparece esta perra colgada… y recién después opinar.
Por otra parte, esta sociedad, que rápidamente juzga, parece no tener memoria ni individual ni colectiva, ya que de esta sociedad surgen cazadores que matan por deporte (o placer) desde jabalíes hasta perdices, una sociedad que regala hondas y rifles comprimidos, de donde surgen niños que patean sapos y otros que ponen cigarrillos a los escuerzos, surgen los que dan anabólicos a los galgos y caballos para que ganen carreras, que mata vacas, pollos y cuanto bicho sea comestible o que asiste a circos o espectáculos de jineteada donde se tortura al caballo con espuelas o el rebenque en forma reiterada para que salten… y es también la sociedad que pide exterminio de perros en caso de que maten ovejas o gallinas… y entonces me surge que puede que haya muertes que sean menos terribles en función de su utilidad o de los que representan…. Ya que es posible que sufra más un gallo en una riña o un perro en atado durante todo el día a una cadena que la galga que colgaba de un árbol… y que ni siquiera sabemos si murió de esa forma.
Para concluir la nota pero no la cuestión, me gustaría aclarar que he considerado solamente ejemplos con animales, porque con ellos sobra, pero que podríamos haber considerado muchos mas donde los sufridos y/ beneficiados por la críticas son seres humanos.
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