El Proyecto no favorece la Democracia participativa, ni la pluralidad política.
Por Diputado Abel Buil (GEN)
Porqué digo que es un traje a medida para el Partido Justicialista? Después de estudiar y analizar el Proyecto que impulsa el oficialismo, observamos muy claramente que los cambios que sugieren han sido pensados más para beneficio propio que para construir reglas de juego perdurables en el tiempo.
La decisión de ir al sistema de Internas Abiertas, obligatorias y simultáneas, no es para posibilitar el pluralismo y la participación ciudadana, sino más bien pensando en los problemas internos del movimiento peronista, hoy dividido en varios proyectos distintos. En otro momen-to, con la oposición debilitada, el Justicialismo no hubiera dudado en resolver su interna en las elecciones generales, presentando dos, 3 o más candidatos presidenciales.
Una de las perspectivas necesarias que se debe tener cuando se plantea una reforma polí-tica, o una mera reforma electoral -para ser más exactos- es llegar a un consenso con todas las fuerzas de la oposición, más aún después de haber perdido una elección, como ocurrió en la provincia hace sólo cinco meses. Y poner la mirada en el largo plazo y no sólo en la coyuntura, porque se trata de la norma que fijará las reglas de juego para todos los partidos políticos y la forma de representación de los ciudadanos.
Lo que se necesita, después de la crisis política y de representación que vivimos en el país en el año 2001, es ampliar la multiplicidad de ofertas electorales, y no restringirla sólo a las grandes partidos mayoritarios, que siguen en una crisis de identidad.
ES FUNDAMENTAL IR A UN SISTEMA PROPORCIONAL DE REPRESENTACION
No solo es necesario y conveniente establecer un sistema proporcional en la representa-ción política, sino que es una exigencia de nuestra Constitución Provincial con la cual estamos en falta. Sí en el artículo 60º de la misma dispone: “La proporcionalidad de la representación será la regla en todas las elecciones populares para integrar cuerpos colegiados, a fin de dar a cada opinión un número de adherentes…” Y el sistema que más favorece la proporcionalidad es el sistema D`Hont, que está legislado en el Código electoral nacional, y se aplica para elegir nuestros Diputados Nacionales, en nuestra provincia y en todo el país. Por eso nos parece inco-herente que todavía no hayamos cambiado el sistema de cuociente que rige en la Ley provincial, donde a los legisladores provinciales, concejales y consejeros escolares los elegimos y distri-buimos los escaños obtenidos por un sistema diferente, que favorece y aumenta la representa-ción de la mayoría. Así lo he entendido yo y otros legisladores como el Diputado Feliú del Par-tido Justicialista, que hemos presentados distintos proyectos de Ley para modificar la Ley Elec-toral provincial e instituir el sistema de D`Hont de proporcionalidad representativa. Opino que el sistema de cuociente que hoy nos rige es retrógrado, no se ajusta a la letra de la Constitución, y fundamentalmente desvirtúa la elección del representante que el ciudadano eligió. Ejemplo de estas distorsiones abundan; pero para dar sólo algunos muy claros, podemos mencionar: En el año 2005, en la Ciudad de La Plata, el Justicialismo con sólo la obtención del 26 % de los sufra-gios, obtuvo el 100 % de la representación de los diputados, quedándose con seis diputados y ninguno para las otras fuerzas opositoras. Otro ejemplo a mencionar en el mismo año en la sép-tima sección electoral de la provincia, el PJ tuvo el 35 % de los sufragios y también consiguió el 100 % de los Senadores Provinciales en juego, contra ninguno de la oposición; y en la misma sección electoral, con parecido porcentaje del 36% de los sufragios el Acuerdo Cívico y Social, obtuvo los tres Senadores en disputa consiguiendo el 100 % de la representación. Por eso esto es inadmisible y es urgente modificarlo. Fue un error impulsado a principios de los años año de la recuperación democrática, por un ministro político del entonces gobernador Armendáriz, y pensado también en la coyuntura política del momento, sin quererlo terminó beneficiando por mucho tiempo al partido justicialista que gobierna desde hace 22 años esta provincia.
Refiriéndonos ahora al proyecto que impulsa el oficialismo, nos parece incomprensible y contradictorio que, estableciendo en el artículo 15º del mismo el sistema D`Hont propor-cional para aplicar en las internas primarias abiertas, no se establezca el mismo sistema de proporcionalidad para la elección general definitiva, en la que se eligen los cargos públi-cos, quedando sin modificar uno de los factores más distorsivos de la ley electoral provin-cial.
Por otra parte resulta inconsistente que, luego de la derrota electoral, hace sólo dos meses atrás, el propio oficialismo halla presentado un Proyecto de Ley de Reforma Política, firmado por los Senadores del Bloque Justicialista, impulsando el Sistema Proporcional D`Hont para los cuerpos colegiados de toda la provincia, con el mismo piso del 3% que indica el Código Electo-ral Nacional para la lista de Diputados Nacionales, y ahora, en un extraño golpe de timón, cam-bian repentinamente la posición y ratifican el carácter distorsivo de la actual ley electoral.
Si bien estamos dispuestos a debatirlo y estudiarlo con el tiempo necesario como merece una ley de tamaña importancia y llegar a los consensos necesarios para mejorar la institucionali-dad de nuestra provincia, no podemos dejar de señalar que el proyecto impulsado por el oficia-lismo tiene varios puntos muy cuestionables. El padrón que se pretende usar para la elección es un padrón viejo, de dos años anteriores, que dejaría sin posibilidad de participar a los jóvenes entre 18 y 20 años y que, particularmente, difiere del padrón actualizado que se establece en el proyecto de reforma electoral nacional que tiene media sanción de la Cámara de Diputados de la Nación, es decir que en cada elección se votaría con dos padrones distintos.
La implementación de internas abiertas, obligatorias y simultáneas para los partidos, es una idea que podemos discutir y compartir en parte, es más fue ley en nuestra provincia tras un largo debate cuyo principal impulsor fue el diputado Marcelo Elías. Pero luego, fue el propio Justicialismo quien no la cumplió y quien la derogó.
Por eso entendemos que se trata de un proyecto para solucionar los problemas internos del Justicialismo, de contener algunos dirigentes y militantes que se están yendo. Pues el radicalis-mo ya cuenta en su carta orgánica con el sistema proporcional D`Hont para la distribución de los cargos en las internas partidarias.
En realidad los problemas que surgieron en las últimas elecciones fueron otros. Por ejem-plo en el año 2007 fue la sustracción de boletas de algunos partidos, que no tenían la cantidad de fiscales, o cuando las reponían, había electores que sistemáticamente las robaban; y eso se solu-ciona implementando el sistema de Boleta Única, que ha sido impulsada por la diputado Etche-coin Moro. Otro de los problemas más graves en esta última elección fue la estafa a los ciuda-danos que se hizo con la postulación de candidatos testimoniales que se hacen elegir a cargos que no están dispuesto a asumir, como lo vemos por estos días. Esto tampoco se soluciona con la reforma propuesta por el oficialismo.
Que hace falta una Reforma Electoral, es cierto, pero con el debate de todos los proyectos puesto arriba de la mesa y con el estudio y análisis suficiente.-
Por Diputado Abel Buil (GEN)
Porqué digo que es un traje a medida para el Partido Justicialista? Después de estudiar y analizar el Proyecto que impulsa el oficialismo, observamos muy claramente que los cambios que sugieren han sido pensados más para beneficio propio que para construir reglas de juego perdurables en el tiempo.
La decisión de ir al sistema de Internas Abiertas, obligatorias y simultáneas, no es para posibilitar el pluralismo y la participación ciudadana, sino más bien pensando en los problemas internos del movimiento peronista, hoy dividido en varios proyectos distintos. En otro momen-to, con la oposición debilitada, el Justicialismo no hubiera dudado en resolver su interna en las elecciones generales, presentando dos, 3 o más candidatos presidenciales.
Una de las perspectivas necesarias que se debe tener cuando se plantea una reforma polí-tica, o una mera reforma electoral -para ser más exactos- es llegar a un consenso con todas las fuerzas de la oposición, más aún después de haber perdido una elección, como ocurrió en la provincia hace sólo cinco meses. Y poner la mirada en el largo plazo y no sólo en la coyuntura, porque se trata de la norma que fijará las reglas de juego para todos los partidos políticos y la forma de representación de los ciudadanos.
Lo que se necesita, después de la crisis política y de representación que vivimos en el país en el año 2001, es ampliar la multiplicidad de ofertas electorales, y no restringirla sólo a las grandes partidos mayoritarios, que siguen en una crisis de identidad.
ES FUNDAMENTAL IR A UN SISTEMA PROPORCIONAL DE REPRESENTACION
No solo es necesario y conveniente establecer un sistema proporcional en la representa-ción política, sino que es una exigencia de nuestra Constitución Provincial con la cual estamos en falta. Sí en el artículo 60º de la misma dispone: “La proporcionalidad de la representación será la regla en todas las elecciones populares para integrar cuerpos colegiados, a fin de dar a cada opinión un número de adherentes…” Y el sistema que más favorece la proporcionalidad es el sistema D`Hont, que está legislado en el Código electoral nacional, y se aplica para elegir nuestros Diputados Nacionales, en nuestra provincia y en todo el país. Por eso nos parece inco-herente que todavía no hayamos cambiado el sistema de cuociente que rige en la Ley provincial, donde a los legisladores provinciales, concejales y consejeros escolares los elegimos y distri-buimos los escaños obtenidos por un sistema diferente, que favorece y aumenta la representa-ción de la mayoría. Así lo he entendido yo y otros legisladores como el Diputado Feliú del Par-tido Justicialista, que hemos presentados distintos proyectos de Ley para modificar la Ley Elec-toral provincial e instituir el sistema de D`Hont de proporcionalidad representativa. Opino que el sistema de cuociente que hoy nos rige es retrógrado, no se ajusta a la letra de la Constitución, y fundamentalmente desvirtúa la elección del representante que el ciudadano eligió. Ejemplo de estas distorsiones abundan; pero para dar sólo algunos muy claros, podemos mencionar: En el año 2005, en la Ciudad de La Plata, el Justicialismo con sólo la obtención del 26 % de los sufra-gios, obtuvo el 100 % de la representación de los diputados, quedándose con seis diputados y ninguno para las otras fuerzas opositoras. Otro ejemplo a mencionar en el mismo año en la sép-tima sección electoral de la provincia, el PJ tuvo el 35 % de los sufragios y también consiguió el 100 % de los Senadores Provinciales en juego, contra ninguno de la oposición; y en la misma sección electoral, con parecido porcentaje del 36% de los sufragios el Acuerdo Cívico y Social, obtuvo los tres Senadores en disputa consiguiendo el 100 % de la representación. Por eso esto es inadmisible y es urgente modificarlo. Fue un error impulsado a principios de los años año de la recuperación democrática, por un ministro político del entonces gobernador Armendáriz, y pensado también en la coyuntura política del momento, sin quererlo terminó beneficiando por mucho tiempo al partido justicialista que gobierna desde hace 22 años esta provincia.
Refiriéndonos ahora al proyecto que impulsa el oficialismo, nos parece incomprensible y contradictorio que, estableciendo en el artículo 15º del mismo el sistema D`Hont propor-cional para aplicar en las internas primarias abiertas, no se establezca el mismo sistema de proporcionalidad para la elección general definitiva, en la que se eligen los cargos públi-cos, quedando sin modificar uno de los factores más distorsivos de la ley electoral provin-cial.
Por otra parte resulta inconsistente que, luego de la derrota electoral, hace sólo dos meses atrás, el propio oficialismo halla presentado un Proyecto de Ley de Reforma Política, firmado por los Senadores del Bloque Justicialista, impulsando el Sistema Proporcional D`Hont para los cuerpos colegiados de toda la provincia, con el mismo piso del 3% que indica el Código Electo-ral Nacional para la lista de Diputados Nacionales, y ahora, en un extraño golpe de timón, cam-bian repentinamente la posición y ratifican el carácter distorsivo de la actual ley electoral.
Si bien estamos dispuestos a debatirlo y estudiarlo con el tiempo necesario como merece una ley de tamaña importancia y llegar a los consensos necesarios para mejorar la institucionali-dad de nuestra provincia, no podemos dejar de señalar que el proyecto impulsado por el oficia-lismo tiene varios puntos muy cuestionables. El padrón que se pretende usar para la elección es un padrón viejo, de dos años anteriores, que dejaría sin posibilidad de participar a los jóvenes entre 18 y 20 años y que, particularmente, difiere del padrón actualizado que se establece en el proyecto de reforma electoral nacional que tiene media sanción de la Cámara de Diputados de la Nación, es decir que en cada elección se votaría con dos padrones distintos.
La implementación de internas abiertas, obligatorias y simultáneas para los partidos, es una idea que podemos discutir y compartir en parte, es más fue ley en nuestra provincia tras un largo debate cuyo principal impulsor fue el diputado Marcelo Elías. Pero luego, fue el propio Justicialismo quien no la cumplió y quien la derogó.
Por eso entendemos que se trata de un proyecto para solucionar los problemas internos del Justicialismo, de contener algunos dirigentes y militantes que se están yendo. Pues el radicalis-mo ya cuenta en su carta orgánica con el sistema proporcional D`Hont para la distribución de los cargos en las internas partidarias.
En realidad los problemas que surgieron en las últimas elecciones fueron otros. Por ejem-plo en el año 2007 fue la sustracción de boletas de algunos partidos, que no tenían la cantidad de fiscales, o cuando las reponían, había electores que sistemáticamente las robaban; y eso se solu-ciona implementando el sistema de Boleta Única, que ha sido impulsada por la diputado Etche-coin Moro. Otro de los problemas más graves en esta última elección fue la estafa a los ciuda-danos que se hizo con la postulación de candidatos testimoniales que se hacen elegir a cargos que no están dispuesto a asumir, como lo vemos por estos días. Esto tampoco se soluciona con la reforma propuesta por el oficialismo.
Que hace falta una Reforma Electoral, es cierto, pero con el debate de todos los proyectos puesto arriba de la mesa y con el estudio y análisis suficiente.-
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